viernes, 12 de febrero de 2010

Se sienta a mi lado y sonríe. Me coge de la mano y pide dos cervezas. Empezamos a hablar de este jueves de mierda, del frío que hace en Madrid. Me mira como si nunca me hubiera visto. Me toca la cara y sonríe, algo tímido, pero seguro de todo lo que me quiere hacer. Yo sigo hablando de este jueves de mierda y le miro a los ojos pero no le veo. Nos reímos, no sé bien de qué. Me entiende, me conoce, me quiere curar desde el principio.

Y yo me pregunto por qué cada puta vez me acuerdo de tus manos. Por qué no consigo quitarme tu voz de la cabeza. Y es que mientras le digo que quiero que llegue el verano sólo pienso en que me quites la ropa. Y mientras intenta curarme te grito que quiero seguir enferma, que quiero que me sigas aplastando lo poco que queda de corazón. Y bebemos cervezas y suena alguna estúpida canción que me recuerda que estoy en el sitio equivocado. Y ya no te soporto y le beso y te detesto y dibujo tu nombre en su cama para que salgas de mi.

Se duerme y me abraza y yo intento quererle. Intento no pensar que vendrá mañana.

Que vendrá mañana. Y que tú no existes [conmigo].

4 comentarios:

  1. Está... desenfocado. Desenfocadamente entretenido :)

    ResponderEliminar
  2. Muy interesante. Cómo te entiendo...

    ResponderEliminar
  3. "Y yo intento quererle". Que buena frase! Saludos

    ResponderEliminar
  4. Qué bien te entiendo...
    Como he visto que te gusta que te lean sin conocerte de nada te dejo aquí la muestra de que te he leído...
    Pásate por mi blog si puedes.

    ResponderEliminar