miércoles, 23 de noviembre de 2011

Estás a punto de suplicarme que no pare,
Me miras con tus ojos grandes,
Mientras mi boca te llega más cerca
De lo que yo estaré jamás.

Qué más da que no te quiera,
Si lo que queremos es carne
y tu piel me sirve como excusa
perfecta.

Tiemblas, y pienso que la mentira
de noche parece un poco más verdad.

Tiemblo, y me pregunto cuándo y dónde
me dejé el corazón por el camino.

lunes, 1 de marzo de 2010

La niña pequeña me mira desde la puerta.
He aprendido a vivir con ella.
Con esta pequeña muerte
Clavada en el esternón.

Hoy he soñado que se me caía el pelo
O me lo arrancaba, da lo mismo.

A veces me sonríe
La niña,
La muerte,
Me tira del pelo,
Se me acurruca
En el corazón.

viernes, 12 de febrero de 2010

Se sienta a mi lado y sonríe. Me coge de la mano y pide dos cervezas. Empezamos a hablar de este jueves de mierda, del frío que hace en Madrid. Me mira como si nunca me hubiera visto. Me toca la cara y sonríe, algo tímido, pero seguro de todo lo que me quiere hacer. Yo sigo hablando de este jueves de mierda y le miro a los ojos pero no le veo. Nos reímos, no sé bien de qué. Me entiende, me conoce, me quiere curar desde el principio.

Y yo me pregunto por qué cada puta vez me acuerdo de tus manos. Por qué no consigo quitarme tu voz de la cabeza. Y es que mientras le digo que quiero que llegue el verano sólo pienso en que me quites la ropa. Y mientras intenta curarme te grito que quiero seguir enferma, que quiero que me sigas aplastando lo poco que queda de corazón. Y bebemos cervezas y suena alguna estúpida canción que me recuerda que estoy en el sitio equivocado. Y ya no te soporto y le beso y te detesto y dibujo tu nombre en su cama para que salgas de mi.

Se duerme y me abraza y yo intento quererle. Intento no pensar que vendrá mañana.

Que vendrá mañana. Y que tú no existes [conmigo].